La gesta de las termopilas – Coleccion Grecia y Roma

En la primavera de 480 a. C., el rey persa Jerjes encabezaba el mayor ejército terrestre jamás reunido hasta entonces. Sus tropas y animales de carga acababan de cruzar el Helesponto —el estrecho de los Dardanelos— a través de unos pontones provisionales y, una vez en Europa, se disponían a recorrer las regiones de Tracia y Macedonia con el apoyo de una impresionante flota que avanzaba en paralelo a la costa. Movía a Jerjes la venganza y la ambición: pretendía vengar las afrentas que los atenienses infligieron al rey Darío, su padre, en la rebelión jonia y en la batalla de Maratón y, además, deseaba incorporar los territorios griegos a su inmenso imperio asiático.

Ese verano llegó a Esparta la noticia de que la flota de Jerjes había atravesado el istmo de Athos, al norte de Grecia, gracias a la excavación de un canal de 2 kilómetros de longitud. Semejante exhibición de fuerza generó tal clima de tensión que Leónidas, uno de los dos reyes espartanos, decidió entregar su vida y la de su guardia personal para retener al ejército invasor en el paso de las Termópilas, la puerta natural de entrada a Grecia central.

La batalla de las Termópilas es uno de los pasajes épicos de Antigüedad,

por la inmensa desproporción en las fuerzas enfrentadas y porque los espartanos sabían que se dirigían a una muerte segura. Fue además uno de los momentos de mayor trascendencia histórica, ya que, sin ese sacrificio, los griegos no habrían podido derrotar a los persas en las posteriores batallas de las guerras Médicas. La historia de Occidente habría sido muy distinta si la expedición de Jerjes hubiese logrado su propósito, un resultado seguro sin las miles de bajas, gran parte en sus tropas de élite, que el ejército persa sufrió en Termópilas. Si en las aguas de Salamina y en la llanura de Platea hubiesen muerto los grandes pensadores y creadores del siglo V a. C. —o en su caso sus padres o sus abuelos—, Grecia clásica no habría alcanzado su brillantez ni habría sido jamás el gran referente que guió a Roma.

En esta charla nos adentramos en los factores que dieron lugar a la batalla y describiremos el transcurso de los tres días de lucha a muerte entre griegos y bárbaros en aquel angosto paso. Un combate heroico que mostró lo mejor y lo peor de la condición humana.